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Testimonios Clases de Yoga Presenciales









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Creo que todos deberían practicar yoga porque calma la mente y llena de amor el corazón. A mí me ha funcionado muy bien y siento que, con el tiempo, le he tomado mucho amor a la práctica. Esa es la parte que más me gusta, porque antes no me gustaba el ejercicio.
Victoria R.
Yo empecé en yoga por dolor de espalda y descubrí que lo que necesitaba era vivir de una manera más tranquila, con más desapego y mayor calma en general, en todo. Así es el yoga, es muy agradecido: uno practica y recibe una gran variedad de beneficios.
Paola T.
El tipo de yoga que hacemos con Dharma es muy mágico. Nunca había vivido el yoga de esa manera tan profunda, bonita y llena de luz holística. Es una experiencia hermosísima.
Mónica H.
¡No puedo dejar de recomendar el yoga! Desde que empecé, mi energía ha cambiado completamente. Me siento más fuerte, más relajado y mucho más positivo.
Luis P.
Hace tiempo que no me sentía tan bien. El yoga me ha dado herramientas para manejar mis emociones y mejorar mi bienestar físico. Cada vez que llego a clase, siento que estoy dejando atrás el estrés del día a día y conectando conmigo misma.
Laura U.
El yoga me ha dado una nueva perspectiva sobre el cuidado personal, y me siento más conectada con mi cuerpo y mi mente. ¡No puedo imaginar mi vida sin él!
Catalina V.


Hace dos años no sabía que una podía estar tan aliviada. Pasé de que me doliera todo, emocional y físicamente, a sentirme tranquila, cómoda y con energía. Recomiendo mucho estas clases.
Ángela L.
Yo era de los que pensaba que el yoga era un fiasco, y aquí estoy ahora practicando tres veces a la semana. El cambio ha sido muy bueno. He mejorado como persona, como papá y como esposo. No pienso abandonar las prácticas con la profesora Dharma.
Juan S.
Gracias a esta práctica, he logrado el equilibrio en varias áreas de mi vida. Es un beneficio que valoro mucho y que quiero seguir alcanzando.
Mar P.
Es muy bonito entender que mi cuerpo y yo somos uno. Que puedo, en cuestión de una hora, regresar a esa conexión. Gracias, profe Dharma, por mostrarme que esa unión siempre está disponible en yoga.
Martha J.
Me gusta mucho practicar con Dharma porque las instrucciones son muy claras. Ella es paciente pero exigente; uno avanza sin afán ni estrés, pero progresa y mejora bastante.
Jesse N.
Desde que practico yoga, me siento más en paz. Es más fácil concentrarme, confiar en Dios y en la vida. Siento que me amo más y que amo más la vida. Mi familia lo nota y, en mi trabajo, también he notado mejores resultados.
Leidy M.
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